Poder dividir tus compras en 12 cuotas y adquirir ese objeto tan deseado es tentador. Sin embargo, lo que la mayoría de las personas olvida es que existe una deuda de tarjeta de crédito que pagar al final.
Acumular este tipo de deuda es una trampa para tus finanzas. La mayoría de las tarjetas de crédito tienen intereses muy altos para quienes se atrasan o dejan de pagar la factura a fin de mes.
Por lo tanto, antes de que permitas que estos intereses se disparen, es importante que tengas la información suficiente para evitar que esto suceda.
Y si ya ha ocurrido, no te preocupes, porque también existen soluciones para aliviar esta deuda. Descúbrelas a continuación.
¿Qué sucede cuando no se paga la factura de la tarjeta de crédito?
Si no pagas la factura de la tarjeta de crédito a tiempo, el banco tendrá derecho a aplicar intereses sobre el monto adeudado.
Por lo tanto, quien no puede pagar el valor total de la factura o solo paga el mínimo puede endeudarse.
El problema es que, cuanto más tiempo pase sin que se pague la factura, los intereses irán aumentando y cada vez más se convertirán en una bola de nieve.
Existen casos en los que, con solo 3 meses de no pagar la factura de la tarjeta de crédito, el monto total puede aumentar en al menos un 50% en comparación con la factura inicial.
Pero, ¿qué hacer si no puedo pagar la deuda de la tarjeta de crédito?
Sabemos que hay momentos en la vida en los que pasamos por grandes dificultades financieras. Sin embargo, es importante tener un plan de contingencia para que estas dificultades no nos perjudiquen en el futuro.
Si te encuentras en la situación de no poder pagar la deuda de tu tarjeta de crédito, es necesario buscar alguna forma de liquidarla.
A continuación, te daremos un paso a paso sobre cómo saldar una deuda de tarjeta de crédito de manera más sencilla.
Conozca el monto adeudado
Sabemos que puede ser difícil enfrentar esos números, sin embargo, es necesario que sepas cuánto debes.
Pero este es un mal necesario para que puedas saldar la deuda. El primer paso para ello es contactar a la entidad emisora de tu tarjeta para solicitar el costo efectivo total de la deuda.
Recuerda que esta información es un derecho tuyo, y cualquier agente financiero que te atienda debe proporcionártela.
Aprovecha este momento para revisar también otras cuentas que puedan estar atrasadas. Lo ideal es que sumes todo lo que necesitas pagar.
Si tienes más de una tarjeta, esto es extremadamente importante: comunícate con cada entidad emisora y haz la suma total para elaborar un plan de pago posteriormente.
Analiza en profundidad tu situación financiera
Ahora ya sabes el total de tu deuda, pero necesitas observar tu situación financiera con atención para poder evaluar el daño.
Y, por supuesto, para salir de esta deuda, necesitarás bastante planificación financiera. No hay nada mejor para planificar que una hoja de cálculo.
Esta hoja puede hacerse en Excel, en aplicaciones de celular, o incluso en papel. Lo importante es anotar.
¿Recuerdas cuando hablamos de presupuesto personal? Eso es exactamente lo que necesitas en este momento: tener un presupuesto para saber cuándo y en qué estás gastando tu dinero.
De esta manera, es posible separar una cantidad mensual para reducir las deudas, evitando así que sigan creciendo.
Durante todo este proceso en que evalúas tus gastos, es importante también analizar y entender qué causó esta situación de descontrol financiero.
Dado que hay una deuda de tarjeta de crédito, revisa tu factura para ver en qué se realizaron esos gastos. Encuentra el error que ocurrió y evita repetirlo en el futuro.
Contacta con la central de tu tarjeta de crédito
Ahora ya conoces los intereses de la deuda de tu tarjeta de crédito, pero es necesario obtener algunas otras informaciones.
Al contactar con la central de tu tarjeta de crédito, es posible que te ofrezcan algún acuerdo para el pago y liquidación de la deuda.
Tendrás más seguridad o podrás hablar directamente con un agente que buscará la mejor solución para ambas partes.
No olvides que aquí el presupuesto que preparaste antes será muy importante. Al fin y al cabo, no quieres contraer una nueva deuda, solo liquidar la anterior.
Asegúrate de que puedes pagar el acuerdo establecido con la central de la tarjeta de crédito.
Evalúa la propuesta con mucha calma
Como se dijo anteriormente, es importante que puedas pagar el acuerdo y no simplemente aceptar por aceptar.
Si por casualidad el monto que acordaste previamente con el agente financiero no se ajusta a tu presupuesto, no aceptes el acuerdo. ¡Esto solo te complicará más!
Aquí valen la pena varios intentos, así que si no se ajusta a tu bolsillo, intenta llamar más tarde o en otro día para renegociar la deuda nuevamente.
Comienza a reducir gastos
Si estás endeudado, es porque gastaste demasiado en algo específico. Pero para solucionar esta deuda, deberás hacer lo contrario.
Recorta gastos en áreas que consideres menos importantes. La hoja de cálculo de presupuesto que mencionamos anteriormente será extremadamente útil en esta etapa.
Las cuentas deben cuadrar al final del mes; debes poder pagar tu factura y otros gastos.
¿Hay algún gasto innecesario en tu rutina? Si es así, elimínalo o redúcelo. Si no hay ninguno, realmente necesitas una evaluación más profunda o incluso la ayuda de un profesional.
¿Solucionaste la deuda? ¡Cuidado con nuevas compras!
Si con todos estos consejos lograste solucionar tu deuda, es necesario tener cuidado con futuras compras.
Sabemos que pagar a plazos es una gran comodidad, ya que te permite adquirir un artículo pagando en pequeñas cuotas durante varios meses.
Sin embargo, estas cuotas tienden a ser muy engañosas. En nuestra mente, el artículo parece barato. Pero cuando sumas todas las pequeñas cuotas, forman un gran valor.
Pagar al contado es una muy buena solución. Claro, no siempre es posible para todos, pero vale la pena evaluar si puedes pagar ese artículo en efectivo y, a veces, incluso conseguir un descuento por ello.
Conclusión
Las deudas de tarjeta de crédito parecen un pozo sin salida. Sin embargo, aquí te mostramos algunas de las mejores soluciones que puedes utilizar para renegociar tu deuda.
Solucionar tu vida financiera no sucede de la noche a la mañana, así que ten paciencia, calma y, sobre todo, organización.